Teilhard de Chardin: El Grupo zoológico humano (1956)

Inicio » Autores y Reflexiones » Teilhard de Chardin: El Grupo zoológico humano (1956)

Colaborador: Diego Martíni

1. UNA SITUACIÓN DE HECHO: LA INCOERCIBLE TOTALIZACIÓN HUMANA Y SU MECANISMO

Con los ojos todavía llenos de horizontes (o más exactamente de espejismos) que un instante nos ofrecieron las doctrinas modernas de la Individuación, las más de las veces, en pleno siglo XX, soñando en un mundo donde todo hombre no ha de hallar en el progreso de su entorno social sino un trampolín cada vez mejor para evadirse en una solución completamente independiente e individualista del problema de la vida: perspectiva tan pluralista como un enjambre de chispas, donde el Fin del Mundo no es en cada caso más que el fin de cada elemento reflexivo considerado, aparte, en la soledad incomunicable de lo que le separa de los demás.

Y como nuestra mirada se halla así cautivada por una especie de fuego artificial en el que nos parece ver una plenitud que nos espera, nuestra atención se aparta , con aburrimiento o irritación, de otra eventualidad completamente distinta, cuyos signos precursores ( en todos los dominios: económico , político y filosófico) se multiplican, sin embargo, para advertirnos de que la Socialización, lejos de ponerse confortablemente a nuestro servicio particular (como esperábamos), sigue con toda tranquilidad su marcha hacia delante, siguiendo un proceso irreprimible de unificación, cuyos engranajes, que funcionan ante nuestros ojos, obedecen a tres tiempos bien claros:

a) Primer Tiempo: comprensión étnica.

Aquí tocamos el «gran resorte» o motor inicial del fenómeno entero. Sobre la superficie cerrada del planeta, la población humana pronto a su punto de saturación, cada vez se aprieta más en virtud del juego interno de reproducción y multiplicación, que tiene por efecto constituir, en el corazón mismo de la Noosfera una fuente continuamente alimentada, o incluso creciente, de energía disponible. Si en semejante asunto se hallara interesado sólo una masa gaseosa, esta proliferación de partículas se traduciría sencillamente en algún efecto mecánico o térmico: aumento de calor o de presión. En el caso de corpúsculos humanos ( o vivientes) la transformación de energía se hace más útil. Se traduce no en una simple equivalencia numérica, sino en un efecto de ordenación. De donde se sigue:

b) Segundo tiempo: organización económica técnica:

Comprímase materia inanimada: y para escapar o responder a la acción, se verá como reacciona cambiando de estructura o de estado. Sométase al mismo tratamiento (con las precauciones y dentro de los límites deseados) materia vitalizada y se verá como se organiza. Sin presión de los corpúsculos entre sí la vida no habría aparecido probablemente jamás en el mundo -ni , con más razón , la Reflexión) ni a fortiori la Sociedad humana. Y, por el contrario, si resulta que la Civilización ha alcanzado en torno a nosotros su nivel y su límite actuales ¿no es en razón de cierta relación óptima entre las dimensiones de nuestro ser y la curvadle astro que nos soporta? Hay que referirse a las dos curvas comparadas de la Cultura y de la Demografía. Después del Neolítico, cuanto más se comprime la humanidad sobre si misma por efecto de crecimiento, más se halla vitalmente obligada, para hacerse lugar a si misma , a descubrir los medios, siempre renovados, de disponer sus elementos del modo más económico de energía y de espacio. Lo que parecía en principio no ser más que una tensión mecánica y un reagrupamiento cuasi-geométrico impuestos a la masa humana, se traduce ahora en una subida de interioridad y de libertad en el seno de un conjunto de partículas reflexivas mejor armonizadas entre sí. Lo cual nos lleva al tercer tiempo de la operación.

c)Tercer tiempo: aumentos concomitantes de conciencia, de ciencia , y de radio de acción.

Una elevación de «temperatura síquica» acompaña automáticamente a una mejor disposición social: ¿no nos hallamos ante la ley fundamental de la Complejidad-Conciencia que sirve de eje y guía a este trabajo?
Este aumento de interioridad mental, y por tanto, de poder inventivo, en la medida en que aumenta el radio de acción y el poder de penetración de cada elemento humano frente a todos los demás, tiene como efecto directo el súper comprimir sobre si la Noosfera. A quien quiera que se tome la molestia de analizar el mecanismo de las fuerzas económico-técnico-sociales, le resultara evidente que somos impotentes para escapar a las energías de acercamiento, cuya presión incontrolable, tras haber crecido casi inobservada durante los períodos pre-industriales de la Historia , viene a desenmascararse a plena luz en toda su potencia.
«Por el juego conjugado de dos curvas, ambas de naturaleza cósmica -la una física (redondez de la tierra) y la otra psíquica (atracción de lo Reflexivo sobre sí mismo )-, la Humanidad se halla cogida, como en un engranaje, en el corazón de un «vortex» siempre acelerado de totalización sobre ella misma.»

2. LA ÚNICA INTERPRETACIÓN COHERENTE DEL FENÓMENO: UN MUNDO QUE CONVERGE

Cuando se hace patente a nuestras mentes la evidencia de que las fuerzas de acercamiento que nos sitian pudieran no ser un accidente temporal, sino el esbozo de un régimen permanente en vías de establecerse para siempre en el mundo en que vivimos, entonces se apodera de nosotros un miedo «mortal»: miedo de perder, en el curso de la transformación que se insinúa, la preciosa chispa del pensamiento, tan trabajosamente encendida tras millones de años de esfuerzo, -nuestro pequeño yo-. El miedo esencial del elemento reflexivo frente a un Todo.

A primera vista esta idea, pesimista y deprimente de una senilidad del Espíritu por anquilosamiento general de la masa humana, no carece de cierta apariencia de verdad. Situémonos de nuevo en la perspectiva de un Universo en vías de enrollamiento: ¿no salta a la vista que nuestros temores de «deshumanización por planetización» son exagerados, puesto que esta planetización que tanto nos asusta no es otra cosa que la continuación auténtica y directa del proceso evolutivo de que ha salido históricamente el tipo zoológico humano? La comprensión físico-social a la que estamos sometidos tiene como resultado final calentar síquicamente la masa humana.

El estudio de la Noosfera: la onda de hominización que se propaga del polo norte al polo sur por el interior de un globo simbólico. La moderna crisis de individuación corresponde, en este esquema, a la llegada de la onda al ecuador: óptimum de separación, de independencia entre los elementos altamente diferenciados en el curso del juego expansional de la Civilización, más posición de equilibrio inestable también, donde, sobre una tierra demográficamente saturada, el menor aumento de apretamiento de las moléculas humanas muy cargadas debía producir la convulsión de que somos a un tiempo actores, protagonistas y testigos: el cambio de hemisferio: el Universo se cierra bruscamente como una cúpula sobre nuestras cabezas; el paso de la Dilatación a la Comprensión.

Si en otro tiempo la conciencia humana pudo conmoverse por el simple descubrimiento de un nuevo continente, que diremos de la revolución que se está produciendo en nuestras mentes a consecuencia de la aparición del campo extraordinario en el que nos vemos forzados a entrar y a avanzar bajo al acción irresistible de un Mundo que incluso se está cerrando. Como un médico que se inclina sobre su enfermo, nos preguntamos muchas veces por qué esta mezcla todavía desconocida de ansiedades y de esperanzas que en torno a nosotros está agitando a los individuos y a los pueblos.

Transformación radical de estructura y de clima , que afecta y modifica de un solo golpe la totalidad de nuestra visión y de nuestra acción. Desde el siglo XIV el Hombre había comprendido sucesivamente que el Cosmos en que se halla situado se movía; y que este movimiento consistía en una disposición orientada hacia Más-Vida. Ahora en un tercer paso empieza a darse cuenta de que la Cosmogénesis, no solo se continua sino que tiende a cerrarse sobre su cabeza más rápidamente de lo que se hubiera pensado.

3.EFECTOS Y FIGURAS DE CONVERGENCIAS

a) Acrecentamiento de la energía libre e intensificación de la investigación.

Hay una Socialización llegada a su punto «ecuatorial» de trastorno y de comprensión, el sistema solicitaba nuestras libertades hacia estados orgánico-psíquicos cada vez más elevados. La Noosfera en vías de cerrazón polar se comporta como un cuerpo que irradia; y su irradiación está formada por una energía libre.

La Energía Libre considerada aquí no es más que la cantidad de actividad humana (a la vez síquica y física) que se ha quedado disponible debido a los progresos conjugados de la inter.-ayuda social y de la Mecánica. Nada más injusto , ni más vano que protestar y luchar contra el paro creciente a que nos conduce inexorablemente la Máquina.

Sin los múltiples automatismos que se encargan de hacer trabajar completamente «solos» a los diversos órganos de nuestro cuerpo, ninguno de nosotros tendríamos holgura para crear, amar , pensar; los cuidados de nuestro «metabolismo» nos absorberían por completo. Análogamente (y dejando en su lugar las perturbaciones ocasionadas por la utilización de una mano de obra demasiado pronto abandonada), ¿cómo no ver que la industrialización cada vez más completa de la Tierra no es sino la forma humano-colectiva de un proceso universal de vitalización que en este caso como en todos los demás, no tiende sino a interiorizar y a liberar?

En presencia de los torrentes de fuerza inutilizada, ya liberados por la convergencia de la masa humana, un reflejo demasiado común es intentar rechazar este desencadenamiento inquietante. Pero la verdadera maniobra ¿no es más bien canalizar el chorro siguiendo la pendiente hacia donde le lleva a todas luces su inclinación natural: quiero decir , en el sentido de la investigación?

La investigación -definida como un esfuerzo impreciso para descubrir incesantemente mejores disposiciones biológicas- representa una de las propiedades fundamentales de la materia viviente. La Investigación es necesariamente tan vieja como el despertar del Pensamiento sobre la Tierra., corresponde a un desarrollo completamente reciente y extremadamente significativo de la Hominización.

Comparemos, desde el punto de vista que nos interesa, el estado del mundo tal cual es en este momento, con el estado en que se encontraba todavía, por ejemplo entre el Renacimiento y la Revolución francesa. Surgen dos evidencias buenas para abrir los ojos. La primera es la súbita y enorme importancia que adquiere en menos de doscientos años el científico-técnico en el campo de las actividades humanas. Hasta los primeros años del siglo XX el científico era un ser de excepción, el «curioso», a quien su hobby o su sueño aísla: un tipo distribuido esporádicamente sobre la masa humana. Hoy, en cambio, los investigadores se cuentan por cientos de miles (y pronto se contaran por millones) ya no dispersos al azar sobre el globo, sino ligados fundamentalmente sobre un amplio sistema orgánico.

No se debe al azar que el número y la interconexión de los investigadores crezcan «excepcionalmente» en una Humanidad que está en vías de concentrarse sobre sí misma. Los dos fenómenos se encuentran estrechamente unidos, o más bien, son uno solo: en el sentido de que la Investigación es la forma nativa y natural que reviste la Energía Humana en el instante crítico de la liberación.

b) Rebrote de la Evolución y Neo-cerebralización.
1) La Evolución que vuelve a partir

Engañados siempre por la lentitud de los movimientos de amplitud cósmica, todos experimentamos una extrema dificultad en pensar al Hombre como desplazándose todavía sobre su trayectoria evolutiva.

Dadas las relaciones que antes hemos señalado entre estrechamiento planetario, desprendimiento de energía humana libre, y subida de la Investigación ¿acaso un Humanidad sometida a la Socialización de compresión no es sinónimo de una Humanidad que se sostiene sobre sí misma para encontrar? ¿Y para encontrar qué , sino el medio de súper o , al menos, ultra – hominizarse? Una cerebralización más alta.

2)Hacia más cerebro

Favorecida por la multiplicación repentina de los medios ultra-rápidos de desplazamiento y de transmisión del pensamiento, ¿es que en torno a nosotros no se multiplica visiblemente la formación de áreas o de islotes síquicos en donde, por convergencia de sus poderes de reflexión sobre un mismo problema en una misma pasión, se organizan los grupos humanos establemente en complejos funcionales en los que es perfectamente legítimo, en buena Biología, reconocer una «sustancia gris» de la Humanidad?
Facilitada por el juego mismo de esta inervación social, se descubre al espíritu la eventualidad revolucionaria de un brote concentrado de la investigación sobre la inteligencia misma de donde emana: la cerebralización colectiva al aplicar la final punta de su inmenso poder para completar y perfeccionar anatómicamente el cerebro de cada individuo.

En el interior de la Noosfera en vías de comprensión , se dibujaría una nueva cadena central y directa: la cerebralización (efecto superior y parámetro del enrollamiento cósmico) cerrándose sobre sí misma en un proceso de auto- perfeccionamiento; una autocerebralización de la Humanidad que se convierte en la expresión más concentrada del rebote reflexivo de la Evolución.

 Colaborador: Diego Martíni



La Agencia de Marketing Way2net nos provee servicios de Marketing Digital, Posicionamiento Web y SEO, Diseño y actualización de nuestra pagina web.